Música y baile en España

 Lo más reciente

Grupo musical Saffram Klipsy tocando en Sitges

Todos reportajes


Grupo musical Saffram Klipsy tocando en Sitges

 I encuentro de música tradicional en Tarazona
(Reportero Henry, edita pateandoespaña)

Orquesta Montes Claros de Zaragoza

Orquestas y bandas del Marqués de Ojuel

Concierto de Órgano en el Monasterio de Veruela de Joxe Benatzi Bilbao de Mundaka

Grupo musical La Cuquera de Albalate de Cinca

Jesús Váquez Flauta andina  grabado en Santoña

Olalla

Euro 2000 Músicos Rumanos (Grabación en Logroño)

Lagutik ( Músicos Rusos Grabado en Soria)

Ver muchas más canciones y música

 

 Lo más reciente

Todos reportajes


Orquesta Selvatana

 Grupo musical Saffram Klipsy tocando en Sitges

I encuentro de música tradicional en Tarazona
(Reportero Henry, edita pateandoespaña)

 


(Reportero Henry, edita pateandoespaña)

Banda de Música de Mota del Cuervo

Orquesta New Band

Grupo musical La Cuquera de Albalate de Cinca

Canon en Re mayor en Santander

Vicente de Santander canta una canción popular de la tierra Cántabra

Norberto de Polonia tocando el órgano en la catedral de Santander

Jesús Váquez Flauta andina  grabado en Santoña

Nocturno en Sol menor Chopin para piano Bibiana García


 Ver muchas más canciones y música

 

La música es una parte fundamental de la cultura y el folclore de España. Abarca los distintos estilos desarrollados en las diferentes épocas históricas que van desde las primeras manifestaciones culturales previas a la propia existencia de España como Estado hasta las manifestaciones artísticas y productos de la industria del entretenimiento.
Música clásica
Renacimiento y Barroco
Véase también: Música del Renacimiento
Véase también: Categoría:Compositores del Renacimiento de España
Véase también: Música del Barroco en España
Instrumentos musicales en el Museo Diocesano de Albarracín.

A principios del siglo XVI se desarrolló un estilo polifónico coral que estaba próximo al estilo de la escuela de música franco-flamenca. Entre los más populares compositores de la época figuran Mateo Flecha el viejo, el dramaturgo castellano Juan del Encina, Juan de Anchieta, Francisco de Salinas y el organista Antonio de Cabezón. Gran parte de la producción musical de la época fue impresa en cancioneros entre los que pueden mencionarse la Silva de Sirenas, el Cancionero de Palacio, el Cancionero de Medinaceli, el Cancionero de Upsala y el Cancionero de la Colombina.

La unificación de estilo ocurrió en el reinado de Carlos I de España, emperador del Sacro Imperio, ya que músicos del norte visitaron España y músicos españoles viajaron a otros territorios del Imperio: Países Bajos, Alemania e Italia. Los grandes compositores del Renacimiento incluyen a Francisco Correa de Arauxo y, especialmente a Francisco Guerrero y Cristóbal de Morales, activos también en Roma. Quizás el de más renombre fue Tomás Luis de Victoria, que también pasó una larga temporada en Roma y cuya perfección polifónica e intensidad expresiva se pueden comparar a las de Palestrina y Lassus. Muchos compositores solían volver hacia el final de su carrera para extender sus conocimientos musicales en su país natal.

Entre las mayores realizaciones del Renacimiento ibérico destaca la música instrumental para vihuela, con exponentes como Luis de Milán, Alonso de Mudarra, Luis de Narváez, Enríquez de Valderrábano o Miguel de Fuenllana. Se atribuye a Vicente Espinel el añadido de una quinta cuerda a la guitarra.

Otros músicos señalables son Bartolomé de Escobedo (1510 - 1563), el poeta Francisco de la Torre (¿1534 - 1594?), Juan de Triana (1460 - 1494), fray Tomás de Santa María (ca 1510 - 1570), Alonso Lobo (hacia 1555 - 1617) y Joan Pau Pujol (1570 - 1626).

Sebastián Aguilera de Heredia (1561 - 1627), organista y compositor español aragonés, hizo de puente entre Antonio de Cabezón y Francisco Correa de Arauxo. Otros notables organistas fueron Pablo Bruna (1611 - 1679), Juan Bautista Cabanilles (1644 - 1712) y Francisco Correa de Arauxo (1584 - 1654).

La música religiosa barroca continuó utilizando rasgos del periodo anterior. Destacan Sebastián de Vivanco (c.1551 - 1622), seguidor de Victoria o Sebastián López de Velasco (1584 - 1659). El protagonista de la música vocal religiosa fue el villancico. Ya presente en el XVI, era típica la forma Tonada (a solo o pocas voces) –Responsión o estribillo (todos)– o Coplas (a solo). Se conserva un enorme número de villancicos, de maestros de capilla como Joan Baptista Comes, Jerónimo de Carrión, Cristóbal Galán o Mateo Romero, entre otros muchos. En la música profana se publicaron cancioneros, como el de la Sablonara con formas de villancico o romance. Entre sus autores podemos recordar a Juan Hidalgo, José Marín y Sebastián Durón.

En Ópera se produjeron dos intentos primitivos, La selva sin amor (1627), con texto de Lope de Vega y música de Filippo Piccinini, y La púrpura de la rosa (1659-60), con texto de Calderón y música de Juan Hidalgo. No tuvieron mucho éxito y están perdidos; sí se conserva la música de Semióperas como La fiera, el rayo y la piedra (1652) o Fortunas de Andrómeda y Perseo (1653), y sobre todo Celos aun del aire matan, ópera de los mismos autores, y una partitura con la música de La púrpura de la rosa de Tomás de Torrejón y Velasco (una copia o una remusicalización de la de obra de Hidalgo para el texto de Calderón).

La Zarzuela, género vocal característico español, se inició con más éxito. Su temática era mitológica y diversas formas musicales vernáculas o importadas. Como autores tenemos de nuevo a Calderón e Hidalgo, y entre las primeras obras destacan El laurel de Apolo (1657), Los celos hacen estrellas (1672), de Juan Vélez de Guevara e Hidalgo, y Los juegos olímpicos (1675) de Agustín de Salazar (1636 - 1675) e Hidalgo. Más adelante, destacó el músico José de Nebra, más cercano a los modelos italianos del s. XVIII.

En la guitarra abundaron los libros, como los de Gaspar Sanz (1640 - 1710) el Poema Harmónico (1694) de Francisco Guerau, y el de Antonio de Santa Cruz (ca. 1700), los de Joan Carles i Amat (1572 - 1642), Luis de Briceño (fl. 1610-1630) y el portugués Nicolás Doizi de Velasco (1590 - 1659). Ya en el XVIII publicó tres libros más Santiago de Murcia (1673 - 1739) y otro más Lucas Ruiz de Ribayaz, (1626 - 1677).

Hacia inicios del siglo XVIII la música española se vio influida por modelos italianos de la época, cuando Domenico Scarlatti, Luigi Boccherini y Gaetano Brunetti, residían en la corte madrileña.

Una parte de la música española se realizó en y para las colonias americanas. De esta Música Virreinal siguen apareciendo colecciones, a veces inmensas, de partituras, como las de las Misionas Jesuítas de la Chiquitania y Moxos (Archivo Musical de Chiquitos, Biblioteca y Archivo Nacionales de Bolivia), o cancioneros en diversos archivos de la península como el Archivo General de Indias de Sevilla. Compositores entre ambos continentes o plenamente americanos son Juan Gutiérrez de Padilla (1590 - 1664), Juan de Araujo (1646 - 1712), José de Orejón y Aparicio (1706? - 1765), los nacidos en Italia Ignacio Jerusalem (1707 - 1769), y Domenico Zipoli (1688 - 1726), Manuel de Sumaya o Zumaya (1678 - 1755), Antonio Durán de la Motta (1675-1736) y Manuel de Mesa y Carrizo (segundo tercio s. XVIII - 1803 post), o el ya nombrado Tomás de Torrejón.

Entre los autores destacados de la primera mitad del XVIII español cabe citar a Sebastián Durón (1660-1716), José de Torres (1670-72 -1738), Francisco Valls (1671-1747), Antonio de Literes (1673-1747), Pedro Rabassa (1683-1767), Juan Francés de Iribarren (1699-1767) y José de Nebra (1702-1768). Antonio Soler y Antonio Abadía son otros compositores del barroco tardío y del inicio del clasicismo.
Del siglo XVIII al XXI

A inicios del siglo XVIII la música española imitó los modelos italianos de la época, siendo importante la influencia de los italianos Domenico Scarlatti, Luigi Boccherini y Gaetano Brunetti, residentes en la corte madrileña. De corta vida, el compositor Juan Crisóstomo de Arriaga ejemplifica la última etapa del clasicismo y el inicio del romanticismo sinfónico.

Además de una importante literatura para guitarra creada por Dionisio Aguado y García, Fernando Sor, Francisco Tárrega y Miguel Llobet, destacaría el magisterio de los violinistas Jesús de Monasterio y Pablo Sarasate.

Entre los principales compositores de Zarzuela del XIX se hallan Francisco Asenjo Barbieri, Ruperto Chapí, Federico Chueca y Tomás Bretón. El sinfonismo cuenta en el siglo XIX con las cinco sinfonías de Pedro Miguel Marqués y las tres de Tomás Bretón, entre otros compositores menos entregados al género. La canción también tuvo un espacio muy importante en la vida musical española del siglo XIX, en un género en el que no sólo hubo hombres, sino también mujeres compositoras de relieve, como Paulina Cabrero.

Entre los compositores posteriores al romanticismo destacan Felipe Pedrell, Isaac Albéniz, Enrique Granados, Joaquín Turina, Manuel de Falla, Antoni Noguera, Jesús Guridi, Óscar Esplá, Federico Mompou, Salvador Bacarisse, Ernesto Halffter, Xavier Montsalvatge, Pablo Sorozábal Joaquín Rodrigo y Roberto Gerhard.

La década de los cuarenta fue un tiempo de intensa labor de reorganización de la vida musical española, que había quedado muy desarticulada tras la Guerra Civil. Se creó la Orquesta Nacional, se reformó el Conservatorio de Madrid, se fundó el Instituto Español de Musicología, se produjo y consolidó todo un repertorio y un público sinfónico, y surgieron intérpretes muy relevantes. Estos entre otros factores, fueron determinantes en la vida institucional, en la creación, en la didáctica y en la investigación histórica de la música española y sentaron unas bases sin las que sería imposible comprender la segunda mitad del s. XX. El nivel de actividad y su implicación con aspectos políticos e ideológicos del nuevo régimen hacen de la década de los cuarenta un campo apasionante de investigación y estudio. A la vez que músicos españoles desarrollaron una importante labor en el exilio, otros permanecieron en España tratando de reanudar sus actividades. Entre estos últimos, Joaquín Rodrigo, a quien Federico Sopeña calificó como "el músico de estos años", ocupó un lugar principal.1​

A partir de los años 60 un gran número de compositores va abandonando las bases nacionales y basando su lenguaje musical en las tendencias de las vanguardias europeas. Entre ellos destacan los nombres de Gerardo Gombau, Carmelo Bernaola, Cristóbal Halffter, Luis de Pablo, Joan Guinjoan, Manuel Angulo, Tomás Marco y Carlos Cruz de Castro.

Los últimos años del siglo XX y los primeros años del siglo XXI ven como algunos compositores, una vez asimiladas las vanguardias europeas, buscan un lenguaje propio, destilando libertad y eclecticismo. Algunos representantes son los vascos Ramón Lazkano, Gabriel Erkoreka o Javier Jacinto, este último también director, los madrileños David del Puerto, José Mª Sánchez Verdú o José Manuel López López y en la escena catalana aparecen Josep Soler, Albert Sardá, Lola Vernel, Benet Casablancas o el compositor y director Salvador Brotons.
Orquestas sinfónicas

    Oviedo Filarmonía
Euskadiko Orkestra Sinfonikoa
Orquestra Simfònica Camerata XXI
Orquesta Ciudad de Granada
Orquesta de la Comunidad de Madrid
Orquesta Filarmónica de Gran Canaria
Orquesta Filarmónica de Málaga
Orquesta Nacional de España
Orquesta Pablo Sarasate
Orquesta Sinfónica de Galicia
Orquesta Sinfónica de la Región de Murcia
Orquesta Sinfónica de Madrid
Orquesta Sinfónica de RTVE
Orquesta Sinfónica de Tenerife
Orquesta Sinfónica del Principado de Asturias
Orquesta Sinfónica de Castilla y León
Orquesta Filarmónica de la Mancha
Orquestra de Cadaqués
Orquestra de València
Orquestra Filharmònica de Catalunya (OCE)
Orquestra Simfònica de Barcelona i Nacional de Catalunya
Orquestra Simfònica de les Illes Balears 'Ciutat de Palma'
Orquestra Simfònica del Gran Teatre del Liceu
Orquestra Simfònica del Vallès
Orquestra Simfònica Julià Carbonell de les Terres de Lleida
Real Orquesta Sinfónica de Sevilla
Real Filharmonia de Galicia

Música folclórica
Artículo principal: Música folclórica de España

La música folclórica en España es tan variada como sus regiones. Sin embargo hubo una serie de ritmos extendidos por toda la península que, con el tiempo, variaron haciéndose distintos en cada región o desaparecieron en algunas y quedaron como particulares de las otras, como es el caso de la jota, que mucha gente cree particular de Aragón, siendo una danza que se interpreta en casi toda la península.

Entre los tipos más importantes hay que destacar, además del flamenco, la charrada, el chotis, el contrapàs, la copla, el cuplé, el fandango, las habas verdes, la isa canaria, las folias, las malagueñas, la polka, la jota, la muñeira, el paloteo o ball de bastons, el pasodoble, las pardicas, la rebolada, la sardana y los verdiales.

También hay que mencionar a los cantautores, que al igual que en la América Latina y Portugal, basan su música en el folclore popular y letras con mensaje político. Los más conocidos son Joan Manuel Serrat y Joaquín Sabina.
El flamenco
Artículo principal: Flamenco

El flamenco, influenciado fuertemente por el folclore tradicional andaluz, suele ser asociado habitualmente al pueblo gitano. Podría ser descendiente parcial de la música morisca de los siglos VIII al XVII. Influencias de la música sacra bizantina y las músicas de Egipto, Pakistán y La India también podrían haber tenido un papel en la formación de la música. Sin embargo, la mayoría de los estudiosos cree que el flamenco es una forma de música de tablado o escenario del siglo XVIII y principios del siglo XIX, al igual que el tango, el rebetiko o el fado, a pesar de admitir posibles influencias de estas fuentes.

Las primeras referencias serias se tallan tal vez en las "Cartas Marruecas" de José Cadalso de 1774. Su origen como representación pública se dio probablemente en Cádiz, Jerez de la Frontera, Triana y Utrera.

Tiene tres formas principales: el cante, el baile y la guitarra (toque).
Música popular

El origen de la música popular se origina en los inicios del mercado de la industria fonográfica a finales del siglo XIX. Entre las primeras grabaciones se encontraban principalmente discos dedicados a la música folclórica.

Uno de los estilos que surgieron en la primera mitad del siglo XX fue la canción melódica.2​ Sus primeras influencias fueron el bolero, la copla andaluza y el cuplé, eliminando gradualmente las influencias del folclore, apoyándose en orquestas, o incluso, en instrumentaciones pop.3​ De hecho, la música española estaba muy influenciada por la francesa e italiana y, a partir de los años cincuenta, por la llegada del rocanrol estadounidense.

Durante los primeros sesenta tuvieron lugar las actuaciones de «matinales del Price» y la llegada del fenómeno yé-yé, proveniente de los mencionados países europeos. Sin embargo, a partir de 1964 con la British Invasion, la música popular española se vio tremendamente influenciada de los sonidos del pop y del rock anglosajones. Dicha influencia dio lugar a lo que se conoció en el país como «la era de los conjuntos». Durante las siguientes décadas, varias generaciones herederas de estos sonidos pop-rock seguirían produciendo grabaciones de estilos influenciados o derivados.

Fueron especialmente destacables unos movimientos que captaron la atención internacional durante los años ochenta conocidos como la movida madrileña y la ruta del bakalao, especialmente a finales de la década. Durante estos años también se asentaron otros géneros que siguen teniendo buena acogida como el hip hop o la música electrónica, de la que se puede destacar el llamado «makineo» o música makina, originaria de la Comunidad Valenciana.


Véanse también: Rock de España e Hip hop español.

Danza española hace referencia al conjunto de bailes de origen español. Estos difieren según regiones y representan los actos culturales más importantes de cada localidad.
Danza tradicional valenciana

El concepto de baile español o ballet español se diferencia del ballet clásico y suele identificarse habitualmente con el baile flamenco, aunque no se identifica de forma estricta con él.
Historia
Baile español, Manet, 1862.

Las pinturas rupestres de la geografía española incluyen los primeros rituales dancísticos, llegando a formar parte de la cultura española.2​

La danza española o clásico español es un proceso de formación que, unida al baile y al ballet español, y a pesar de los inconvenientes históricos, políticos y económicos, ha perdurado hasta la actualidad.2​ Aun así, no está bien reconocida oficialmente, pero, por otra parte, el baile flamenco es el más valorado y representativo.

Hay testimonios del particular cultivo de la danza en España en los autores del mundo clásico y en los de la Edad Media. Los romanos tenían a las bailarinas gaditanas por las más bellas y elegantes del mundo. Fue el Renacimiento el que rehabilitó los bailes populares, dándoles tono y llevándolos muchas veces a los salones elegantes (fandango, charrada, pasacalles,3​ contradanza). Resultó entonces que en el transcurso del tiempo se habían ido perdiendo o confundiendo unos con otros, sin que por eso dejaran de advertirse dos grandes grupos: de un lado, las danzas de ritos guerreros o conmemorativos de grandes batallas, antiquísimos (aurresku, paloteo); y de otro, las danzas rituales religiosas, más propias y tradicionales de la Edad Media.
Danzas regionales

    Aurresku de honor es una danza popular del País Vasco. Este baile suele que interpretar en los eventos especiales, tales como bodas, inauguraciones, homenajes y en otros actos públicos.4​
Ball pla (en español, baile llano) es una danza tradicional y extendida, sobre todo en Cataluña, que data del siglo XVII. Se baila por parejas y con movimientos suaves y lentos. Se divide en tres partes coherentes: Començament, Caiguda, Rístol.5​
Bolero es un baile de ritmo ternario, se divide en tres partes (coplas), que varían muchas veces durante interpretación del baile. Suele interpretarse con acompañamiento de guitarra y de otros instrumentos folklóricos.6​
Chotis es el arte y es una música y baile con origen en Bohemia, que llegó a la península ibérica en el año 1850, cuando por primera vez se bailó en el Palacio Real de Madrid. Se baila en pareja entre hombre y mujer. Al día de hoy,[¿cuándo?] el chotis se considera una danza madrileña, ya que suele interpretarse en las fiestas de San Isidro que tienen lugar en la capital española Madrid.7​
Danza de las lanzas de Ruiloba (danza de Ruiloba) es un baile regional que data del siglo XVI y se realiza en el municipio de Ruiloba Cantabria, que está situada al norte de España. Se baila en su mayoría en las fiestas del Municipio, que se celebran cada año el 2 de julio festividad de la virgen de los remedios (patrona de Ruiloba) "el Remedio" en la localidad de Liandres-Ruiloba, 15 de agosto-nuestra señora de la asunción en la localidad de Barrio la iglesia- Ruiloba (Cantabria),16 de agosto-San roque en la localidad Pando-Ruiloba( Cantabria) y 9 de septiembre El Mozucu en la localidad vecina de Barrio la virgen-Udias (Cantabria).
Danza Prima es un baile típico de Asturias, se baila en un círculo, los participantes van unidos y cogidos de los manos y en el que se puede unir en cualquier momento.8​
Las danzas vascas, euskal dantzak en euskera, son un conjunto de bailes de la cultura del País Vasco (España) y suponen un acto social de gran interés de turistas y entre los habitantes de esta comunidad autónoma.

Bailes populares españoles
Bailarines de Jota Aragonesa

Otros bailes populares españoles con la consideración de danza folclórica más o menos extendidos por distintas zonas del territorio (bailes regionales) son el vito, la jota, la reja, danzas vascas, sardana, muñeira, paloteo, isa canaria, etc.9​

Particularmente, algunos de estos bailes tradicionales son habitualmente considerados como ramas de la danza clásica española, sobre todo el bolero , en su forma denominada la escuela bolera,10​ el fandango, las seguidillas (la seguidilla es un tipo de estrofa y la seguiriya uno de los palos del flamenco), la crotacología o arte de tocar las castañuelas o palillos, habitualmente mientras se baila,11​ y el zapateado.

Alguna clasificación distingue las danzas regionales, que incluyen bailes antiguos como el fandango o modernos como las sevillanas, la danza flamenca, la danza española clásica o escuela bolera, la danza española neoclásica o renacimiento de la danza española a finales del siglo XIX.12​

Otras formas de danza española no relacionadas con la tradición folclórica o flamenca son la danza contemporánea en España (danza moderna o danza contemporánea), el baile juvenil en España (baile juvenil: rock, música disco, hip hop, bakalao, etc.) a veces ligados a alguna subcultura juvenil o tribu urbana; pero que en alguna ocasión incluyen ritmos tradicionales españoles o hispanoamericanos (rumba en sus formas flamenca y catalana), y baile de salón en España (baile de salón) concepto que engloba a algunos bailes españoles (más bien los recientes -del siglo XIX-, como el pasodoble, las sevillanas, o el chotis; o los modificados, como el bolero moderno), otros bailes hispanoamericanos (muchos de ellos cantes de ida y vuelta, originados por el contacto transatlántico: tango, cumbia, milonga, salsa, merengue, etc.) y otros bailes europeos (polca, vals, etc.) brasileños (samba) o estadounidenses (fox trot, swing, rock, etc.).
Compañías de danza
Bailarina de flamenco.

Las distintas compañías de danza son el Ballet Español de Cuba, fundado por Alicia Alonso,13​ el Ballet Nacional de España, fundado por Antonio Gades, especializado en danza española y baile flamenco.14​ y la Compañía Nacional de Danza de España o Ballet Nacional de España Clásico, fundada por Víctor Ullate.15​
Danza española en el arte
Obras cinematográficas

Obras cinematográficas como El amor brujo o Los Tarantos (1962), de Francisco Rovira Beleta, El amor brujo o Bodas de sangre, ambas de Carlos Saura y Antonio Gades, etc.
Composiciones musicales

12 Danzas españolas, de Enrique Granados (entre 1892 y 1900).16​17​18​19​

El sombrero de tres picos o El amor brujo de Manuel de Falla,20​ responsable junto con Federico García Lorca del Concurso de Cante Jondo de Granada de 1922.21​
Obras plásticas
La Danza Española, bronce de Degas.

La Danza Española, escultura de Edgar Degas (hacia 1885), conservada en el Ackland Museum (Chapel Hill, Carolina del Norte, Estados Unidos).22​
Bailarines notables
Bailarines como Antonio El Bailarín, Mimi Bernales, Mariemma y Vicente Escudero, que fue también tratadista, estableciendo el Decálogo del buen bailarín.

Wikipedia